sábado, 28 de abril de 2012

Beltrones vs. México

Beltrones vs. México
       Muy a tiempo y con la voz bajita [en día sábado], la poca gente del PRI atenta, se está viendo obligada a desplazarse a lo que es el principal centro de batalla de estas elecciones de 2012. No son los votos, por que es claro que la gente no va a votar por EPN; sino que solo se trata de mantener y proteger la idea implantada, sin sustento real, de que va a ganar las elecciones.
     Dice Beltrones que si el PRI tiene más recursos y por tanto publicidad, es por que quedaron "mejor posicionados" en 2009, y por tanto la ley es la que les ha otorgado la ventaja en recursos; y finaliza diciendo que "ahí empieza un fenómeno de las percepciones, que es necesario que nosotros empecemos a acotar" [eluniversal.com.mx/notas/844298.html].
     De nuevo el punto. Dice: "las percepciones, que es necesario que nosotros... empecemos a acotar". Eso dice, ¿Pero a qué se refiere?
     Solamente se refiere a una cosa: que al PRI no le importan los votos [pq esos los van a sacar -y "meter"- de cualquier lado], sino mantener la idea implantada en la gente de que EPN va a ganar. O en otras palabras: que con la pura percepción les es suficiente [la idea insertada, de triunfo]; pero ahora de lo que se trata es de no "quemar" ese mecanismo, como les ocurrió con la encuestas, a las que ya nadie les creé. Las encuestas ya dieron lo que tenían qué dar. La idea de triunfo está implantada en la gente, y en estos dos meses de lo que se trata es de gradar ese mecanismo de legitimidad inserta a manera que las impugnaciones sociales no rebasen a las legales [parte accesoria de ese mismo mecanismo: IFE-TRIFE], a fin de poder llegar al 1o de diciembre de este año e investir a Peña Nieto como Presidente. Saben que la gente no va a votar por él, pero sí que creé que va a ganar las elecciones, así que eso de "las percepciones" de que habla Beltrones solo se refieren a la cuidadosa gradación que debe tener su supuesto "triunfo" el 1o de julio entrante.
     Dado que ese teatro futíl de las encuestadoras ya no sirve para nada, ahora el PRI-PAN se va a desplazar hacia el núcleo mismo del mecanismo de legitimación de este proceso electoral: a) que se mantenga el alto abstencionismo [40%]; b) que los anulacionistas se manifiesten en las urnas [votos nulos], c) que Calderón respete el acuerdo de alternancia a cambio de impunidad por su cleptocrática, ineficiente y sangrienta administración espúrea; y d] que se mantenga la idea de que "la gente va a votar por EPN".
     JVM está anulada; solo es una comparsa dentro de ese mecanismo de legitimación. Eso es claro. No puede ni con su alma.
     La cuestión entonces se centra en que esta trama solo puede ser rota si se reduce el abstencionismo, se les persuade a los anulacionistas [en lo más posible], y se denuncia la diferencia tangible que existe entre aquellos que van a votar por EPN [no más del 20%], y los que "creén que va a ganar" [3 a 1 aproximadamente]. A diferencia del PRI-PAN, para el movimiento de López Obrador, los votos sí cuentan, pero no por lo que se refiere a las "preferencias de voto" [por que esas sin duda las tiene: la mayoría de la gente no se traga ese cuento del muñeco espectacular y triunfador EPN], sino por que aparejado al convencimiento de los abstencionistas-anulacionistas, hay un sector muy grande de indecisos que sin duda no van a votar ni por el PRI, ni por el PAN, pero que carecen de una estimulación suficiente que "les rompa" la idea inserta de la invencibilidad de Peña Nieto. Por que de eso se trata todo en estas elecciones, como lo adelanta "la línea" lanzada por Beltrones: para el PRI los votos no importan [esos los van a sacar de cualquier parte], sino cuidar el mecanismo de legitimación logrado; y eso es lo que el movimiento progresista debe de atacar.
La historia no se va a acabar este 1o de julio; a México le esperan días de lucha muy grandes, como para que nadie pueda darse el lujo de la comodidad y la apatía simplona.

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    Cada hombre de ideas resulta ser un ejemplo e influencia para muchas otras gentes: si eres abstencionista, o piensas anular tu voto este 1o de julio, con todo respeto te invito a un debate. Yo defiendo el voto hacia López Obrador, pero no voy a pedirte que votes por él, y en cambio sí que les compartas a los que te rodean el resultado de ese intercambio de ideas. Tener principios e ideología no significa ser pétreo de pensamiento. En esta dirección.